Qué es un sellador de juntas

Sellador de juntas: ¿Qué es y cómo utilizarlo correctamente?

Un sellador de juntas es un tipo de producto que se utiliza para sellar y rellenar fisuras, grietas o juntas entre dos superficies. Está diseñado para prevenir la filtración de líquidos, gases, polvo o cualquier otro material a través de estas aberturas. El uso de un sellador de juntas se utiliza en una amplia variedad de aplicaciones y pueden ser utilizados tanto en interiores como en exteriores. Además, están disponibles en diferentes formas, como líquidos, pastas, cintas o espumas.



A continuación, abordamos más sobre este producto y cómo debes usarlo correctamente. ¡Toma nota!

¿Cuándo debes utilizar un sellador de juntas?

Algunos de los usos más comunes que tiene este producto son los siguientes:

  • Construcción: Se utilizan en proyectos de construcción para sellar juntas en ventanas, puertas, baños y cocinas, en reparaciones de fisuras antes de pintar, en el pegado elástico de distintos materiales y en otros lugares donde se requiere crear una barrera contra la humedad o el aire.
  • Automóviles: Otro de sus usos es sellar juntas en el motor, en la transmisión y en otras partes del vehículo. Con ello, se evitan las fugas de aceite, refrigerante u otros fluidos.
  • Fontanería: Se utilizan para sellar juntas en tuberías, grifos, inodoros y otros accesorios de plomería para, de este modo, evitar fugas de agua.

Tipos de selladores de juntas

Existen varios tipos de selladores de juntas. Cada uno está diseñado para satisfacer las necesidades específicas en función del material de las superficies, la flexibilidad requerida, la resistencia a diferentes elementos y la aplicación específica. Estos son los tipos más comunes de selladores de juntas que podemos encontrar en el mercado:

Selladores de silicona

Son muy versátiles y se utilizan en aplicaciones de sellado en interiores y en exteriores. Entre sus características, destacan por ser flexibles, resistentes al agua, a los rayos UV y a temperaturas extremas. Se suelen utilizar en juntas de baños, cocinas, ventanas, vidrios y electrodomésticos, entre otros. Hay diversos tipos de siliconas adecuadas para aplicaciones sobre diferentes materiales.

Selladores acrílicos

Los selladores acrílicos son económicos y fáciles de aplicar. Resultan adecuados para sellar juntas en superficies interiores, como grietas en paredes, molduras, marcos de ventanas y puertas. Sin embargo, no son resistentes al agua y pueden degradarse con el tiempo.

Selladores de poliuretano

Los selladores de poliuretano son duraderos, flexibles y resistentes a los productos químicos, la humedad y, en algunos casos, a los rayos UV. Se utilizan en aplicaciones de interior y exterior, como juntas en pisos, techos, ventanas, construcciones de madera, hormigón y mampostería.

Selladores de silanos modificados

Los selladores de silanos modificados son muy versátiles, son elásticos, de alta adherencia y se pueden utilizar aunque el soporte tenga algo de humedad.

Pasos para utilizar un sellador de juntas

El proceso para utilizar un sellador de juntas requiere seguir un conjunto de pasos:

  1. Preparación: En primer lugar, asegúrate de que las superficies estén limpias, secas y libres de polvo, grasa u otros contaminantes. Después, limpia las áreas a sellar con un limpiador adecuado y sécalas completamente.
  2. Aplicación del sellador: El siguiente paso es abrir el envase del sellador y cortar la boquilla en un ángulo adecuado, según el ancho de la junta a sellar. Coloca el tubo en una pistola aplicadora si es necesario.
  3. Extrusión del sellador: Aplica una presión uniforme en la pistola aplicadora para hacer que el sellador salga por la boquilla. Comienza a aplicar el sellador en una esquina de la junta y continúa de manera uniforme a lo largo de toda la longitud.
  4. Alisado y perfilado: Utiliza una herramienta adecuada, como una espátula o un dedo humedecido con agua y jabón, para alisar y perfilar el sellador. Esto ayudará a asegurar un sellado hermético y una apariencia estética.
  5. Tiempo de secado y curado: Deja que el sellador se seque y cure según las instrucciones del fabricante. Esto puede variar dependiendo del tipo de sellador utilizado. Evita perturbar el sellador durante este período para permitir un curado adecuado.
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