Es habitual tener en nuestros hogares una gran variedad de productos de limpieza para diferentes menesteres: desinfectar el baño, fregar el suelo, desengrasar la cocina, etcétera. Todos ellos son muy útiles para mantener nuestro hogar en perfectas condiciones pero... ¿Sabías que si mezclas diversos productos de limpieza puede ser peligroso?

Ten en cuenta que, la mayoría de estos productos, cuentan con agentes químicos que son muy potentes y que, mezclados con otros, pueden producir una reacción o, incluso, una pequeña explosión. Por este motivo, en este artículo queremos darte unos trucos de limpieza y descubrirte cuáles son los 5 productos de limpieza que nunca debes mezclar para que, así, mantengas la seguridad en tu hogar.

Combinaciones prohibidas de productos de limpieza

Para que puedas estar tranquilo cuando realices tus tareas de limpieza, a continuación vamos a descubrirte cuáles son las combinaciones de productos de limpieza que nunca deberás hacer. Estos productos cuentan con agentes que, si los mezclas, podrían provocar reacciones insalubres para tu salud y la de tu familia.

1. Nunca mezcles lejía con alcohol

Dentro de este listado de los productos de limpieza que nunca debes mezclar resaltamos la lejía y el alcohol. Ambos productos, si se mezclan, pueden producir la emisión de gases dañinos para nuestra salud: el cloroformo y el ácido muriático. Estos gases pueden dañar nuestro sistema nervioso, ojos, piel, riñones, pulmones, hígado, etcétera. Además, el cloroformo puede producir una gran malestar que te haga perder incluso la conciencia.

2. Lejía con amoniaco, ¡jamás!

Otra de las combinaciones prohibidas es la de la lejía con el amoniaco ya que, si las mezclas, creará unos vapores que son tóxicos para nuestro organismo. En concreto, será nuestro sistema respiratorio el que saldrá perjudicado produciendo dificultades respiratorias, náuseas, mareos, etc. Pero, además de esto, el amoniaco puede llegar a producir una explosión en tu hogar si lo mezclas con la lejía. Así que, ¡muchísimo cuidado!

3. La lejía con vinagre nunca se debe mezclar

Muchas veces queremos limpiar la casa sin productos químicos empezando a usar ingredientes naturales como, por ejemplo, el vinagre. Y lo cierto es que se trata de un producto altamente desinfectante que resulta perfecto para limpiar algunas zonas de nuestra casa.

Sin embargo, nunca deberemos mezclar el vinagre con la lejía porque ambos productos pueden generar vapores que son tóxicos y que, si entran en nuestros ojos, pueden producir graves quemaduras. Además, si los inhalamos también pueden dañarnos los pulmones considerablemente.

4. Limpia con lejía de forma individual

Como has podido comprobar, la lejía es un producto de limpieza bastante peligroso. Sin embargo, es uno de los más usados por su capacidad desinfectante y antibacteriana. Para poder asegurarte de que estás limpiando tu casa de forma segura lo único que tienes que hacer es evitar mezclar la lejía con otro producto de limpieza. Úsala siempre de forma individual y, así, podrás asegurarte de que nada malo puede ocurrir.

5. Nunca mezcles el bicarbonato de sodio con vinagre

Hablamos ahora de dos ingredientes que se usan muchísimo en las tareas del hogar. Muchas personas limpian con bicarbonato o con vinagre, son dos opciones la mar de recomendables para lucir una estancia limpia y desinfectada.

Sin embargo, nunca deberemos mezclar ambos productos porque, si lo hacemos, neutralizamos sus propiedades y no nos ayudan a limpiar ni a desinfectar. Además, resulta una combinación peligrosa porque puede llegar a provocar una explosión. Así que nunca los mezcles. Consulta todos los usos del bicarbonato en limpieza para ver sus propiedades.

Consejos de seguridad sobre tus productos de limpieza

Vamos a darte otros consejos que nos parecen imprescindibles para que puedas asegurarte de que estás usando correctamente los productos de limpieza. Son los siguientes:

• Aclara la lejía y el amoniaco con agua: siempre que limpies algún espacio con estos productos es recomendable que aclares bien con agua para retirar cualquier sustancia contaminante.
• Evita el uso de lejía y amoniaco: como has podido comprobar, ambos productos con un tanto peligrosos, por tanto, puedes optar por limpiar tu hogar con otros que sean menos fuertes e igualmente higiénicos
• Sigue las instrucciones: es recomendable que siempre leas con atención las indicaciones de uso que encontrarás en la etiquete del producto y saber si un producto de limpieza es ecológico o si, por el contrario, debes tomar algunas precauciones para su correcto uso