La freidora es un utensilio que se ensucia muy rápidamente y que su limpieza debe ser cuidadosa para cocinar de forma saludable. Ten en cuenta que el aceite es un producto que puede reciclarse y usarse en varias ocasiones, sin embargo, cuando se fríen alimentos llega un momento que se tiene que cambiar y limpiar la freidora para eliminar restos de sabor y suciedad acumulados.

En este artículo vamos a descubrirte 8 pasos para limpiar la freidora correctamente y que puedas cocinar los alimentos de forma saludable y nutritiva.

Cómo limpiar la freidora paso a paso

A muchas personas les da un poco de reparo limpiar la freidora porque el aceite que en ella se usa tiene una textura pringosa y puede ser difícil de limpiar. Sin embargo, a continuación, te ofrecemos unos sencillos trucos de limpieza y te indicamos los 8 pasos para limpiar la freidora de forma fácil y sencilla que te ayudarán a mejorar la higiene de tu cocina.

1. Vacía el aceite: el primer paso será vaciar el aceite acumulado en la freidora. Es importante que esté apagada y que el aceite esté frío para que la limpieza sea profunda y completa. No tires el aceite en el fregadero porque es muy contaminante, ponlo para reciclar.
2. Extrae la cubeta: ahora, para limpiar la freidora  tendrás que sacar la cubeta donde está el aceite y llenarla con agua caliente y jabón. Deja que repose para que, así, se despegue bien la suciedad y la pringosidad del aceite.
3. Agua y vinagre: si quieres limpiar la freidora con agua y aceite, debes saber que esta mezcla es perfecta para limpiar en profundidad este aparato y eliminar los malos olores que puedan haber de su uso. Vierte esta mezcla en el interior de la freidora y deja que actúe unos minutos.
4. Seca y elimina la grasa: el siguiente paso consistirá en retirar el agua y frotar con un estropajo para intentar retirar la grasa acumulada en su interior. Una buena idea es usar un papel de cocina que te ayudará a eliminar estos excesos.
5. Agua con bicarbonato para las manchas: en el caso de que todavía te queden manchas que no se quitan fácilmente, una buena opción es que crees una pasta mezclando agua y bicarbonato para limpiar la freidora. Con este remedio, podrás limpiar y frotar de forma específica en la zona que quieres limpiar y conseguirás eliminar cualquier suciedad más incrustada. Otra opción es decantarte por comprar un producto desengrasante que también te ayudará a limpiar en profundidad.
6. Limpia el cesto de la freidora: el siguiente paso para poder limpiar la freidora es que te centres en el cesto donde se introducen los alimentos a freír. Puedes limpiar el cesto de la freidora a mano con agua caliente y detergente o, también, en tu lavaplatos a una temperatura máxima.
7. Limpia el exterior de la freidora: a continuación, también deberás limpiar la parte externa de la freidora. Para ello bastará con que uses un producto desengrasante o que vuelvas a usar el bicarbonato con agua que hemos usado anteriormente,
8. Limpia el cable de la freidora: para conseguir una limpieza más completa también te recomendamos que limpies el cable con el que se enchufa el electrodoméstico. Esto lo puedes hacer con el desengrasante también para conseguir una limpieza extrema.

Recuerda que, antes de volverla a usar, es importante que la freidora esté completamente seca. Solo así, podrás volver a verter el aceite y cocinar de nuevo tus recetas.

¿Cada cuánto limpiar la freidora?

Otro punto importante para limpiar la freidora en profundidad es tener en cuenta la frecuencia que se debe seguir para limpiar la freidora. Como hemos dicho, no se tiene que limpiar tras cada uso porque el aceite puede reciclarse y usarse varias veces. Sin embargo, lo cierto es que sí que es recomendable lavarla cada 3 o 4 usos para conseguir cocinar los alimentos de una forma saludable.

Además, si has cocinado algún ingrediente con un olor o sabor muy fuerte, te recomendamos que la limpies pues, de lo contrario, este intenso sabor podría impregnarse en el resto de recetas que elabores.