Además de suponer un importante ahorro y una contribución al cuidado del medio ambiente, reutilizar alimentos puede convertirse en una tarea muy divertida si sabemos hacerlo. Te contamos algunas ideas para reutilizar alimentos y convertirlos en nuevos productos, a continuación.
Los mejores trucos para reciclar los alimentos
Ambientadores, tintes, objetos decorativos... Son tantas y tantas las cosas que se pueden hacer con restos de comida que vamos a tirar al cubo de la basura... Además de ahorrarte un dinerillo y descubrir los alimentos que pueden ayudarte a limpiar la casa, con estas sencillas ideas para reutilizar alimentos estarás también contribuyendo al cuidado del medio ambiente. ¡Toma buena nota de todas ellas!
1. Membrillo y otros cítricos
Si tienes algún fruto de membrillo en casa y no le has dado uso culinario en varias semanas, puedes utilizarlo como ambientador antes de tirarlo definitivamente a la basura. Tan sólo tienes que introducirlo dentro del armario y conseguirás que tu ropa se deshaga de la humedad y de otros muchos olores desagradables.
También los cítricos como la naranja, la mandarina o el limón pueden convertirse en excelentes ambientadores naturales para que tu casa huela bien antes de tirarlos a la basura. Y por supuesto, las pieles de los cítricos que están algo pasados, son también un excelente ingrediente para dar aroma en productos de repostería. Sólo tienes que rallar la piel de estas frutas cuando prepares un bizcocho o unos exquisitos muffins caseros.
Y con las cáscaras de cítricos también puedes fabricar originales portavelas. Tan sólo tienes que vaciar la naranja, la mandarina o el limón y colocar en el interior una vela. Al encenderla conseguirás que tu portavelas desprenda un olor muy intenso y especial.
2. Los posos del café
Si tienes una cafetera italiana o tipo expresso, los posos del café pueden también tener algunas utilidades muy prácticas. Por ejemplo, tus plantas crecerán más sanas si mezclas estos posos con la propia tierra de las macetas. Y también pueden convertirse en el sustrato perfecto si quieres plantar setas en tu jardín.
Pero los posos del café también pueden ser muy útiles si tu nevera desprende aromas fuertes, Tan sólo tienes que colocar los posos de café dentro de un vasito y depositarlo en el fondo de la nevera. Procura cambiarlos cada semana y tu frigorífico quedará libre de molestos olores. Si eres más de té, también te interesará saber que puedes reciclar las bolsas de té siempre que lo desees.
3. Refrescos sin gas
Cuando las botellas de refrescos se han quedado sin gas, puedes emplear el contenido para hacer cubitos de hielo con sabores. Tan sólo tienes que rellenar las cubiteras con estos refrescos que se han desvirtuado, y utilizar estos cubitos cuando tomemos estos mismos refrescos con gas ya que con ellos potenciaremos su sabor.
4. Piel de cebolla
Cuando peles las cebollas puedes guardar todas las pieles y emplearlas como tinte natural para tejidos. Tan sólo tienes que hervir estas cáscaras en agua, e introducir la prenda en este agua cuando una vez que hayas colado todas las pieles.
Para conseguir un efecto más moderno, coge la prenda y hazle pequeños nudos a través de cuerdas o lazos.
5. Patatas fritas
Cuando las patatas fritas de bolsa se quedan demasiado viejas y ya no son crujientes, en lugar de tirarlas, puedes ponerlas en el microondas durante 10 segundos y les devolverás la textura que tenían originalmente. Si no tienes microondas, puedes también ponerlas en el horno a máxima temperatura durante cinco minutos.
6. Migas de pan
Si tienes migas de pan, galletas o snacks no debes tirarlas porque pueden ser un práctico ingrediente a la hora de freír alimentos. Tan sólo tienes que colocarlas todas en una bolsa y aplastarlas bien con un rodillo de amasar. Estas migas te servirán como pan rallado para preparar filetes a la milanesa, pescado rebozado, croquetas o filetes empanados.
