Los limoneros son árboles a los que se les puede sacar un gran partido, siempre y cuando estén bien cuidados y reciben toda la atención que necesitan en las diferentes épocas del año. Si te gusta la horticultura, estos son los pasos que debes seguir para podar tu limonero.

Así debes podar tus limoneros para que queden perfectos

Si estás creando tu propio huerto en casa, y quieres contar con uno o varios limoneros entre tus árboles, te interesará saber que, una vez que hayas plantado los esquejes, tendrás que esperar, al menos, tres años para que el árbol crezca lo suficiente como para poder podarlo.

Una vez que el limonero haya crecido y tenga sus ramas de un tamaño considerable, ha llegado el momento de comenzar a podarlo. Los mejores meses del año para efectuar la poda de los limoneros son, en invierno, enero y febrero, y en verano, los meses de junio y julio.

Las primeras ramas que debes podar son aquellas que estén en mal estado, ten en cuenta que la poda es el mecanismo más efectivo para que la salvia del árbol se reparta de manera uniforme desde las raíces, pasando por el tronco y hasta la copa.

La poda debe iniciarse con el corte de las ramas inferiores, de tal forma que, poco a poco, vayas equilibrando todos los lados del árbol. En este sentido, tienes que asegurarte de que hay la misma cantidad de ramas a un lado y a otro del árbol, de tal forma que el peso esté completamente repartido por todo el limonero.

Si observas que en el tronco del limonero han salido esquejes de otras plantas, deberás también incluirlos en la poda, ya que estas otras plantas van a alimentarse del árbol, y con esto impedirán que la salvia se reparta por todas las zonas del árbol.

Una vez que hayas podado las ramas inferiores, las ramas estropeadas, y aquellos esquejes de otras plantas que han brotado en el tronco del limonero, debes seleccionar las tres ramas principales del árbol, y procurar que éstas sean las que se alinean de una forma más uniforme con el tronco del limonero.

Ten en cuenta que estas tres ramas principales serán las encargadas de soportar la mayor parte del peso de los frutos, por lo que ahora, debes intentar que tanto el tronco como estas tres ramas que has seleccionado, se mantengan siempre en un perfecto estado de conservación.

Por ello, a través de la poda, debes eliminar también todas aquellas ramas secundarias que vayan brotando de las tres ramas principales del árbol. Y si observas que alguna de estas ramas está creciendo bien dirigida, entonces puedes dejar unos 20 centímetros de cada una de estas ramas que brotan de las ramas principales. Conoce cómo decorar tu casa con ramas y aprovecha las ramas de la poda para dejar tu hogar bonito de forma creativa.

Al finalizar el proceso de poda, lo más normal es que todos tus limoneros luzcan limpios y que a luzcan como un árboles pequeños y con una copa bien recogida. En principio, es normal que te parezcan que tus limoneros son muy pequeños una vez que los hayas podado pero, no te preocupes, ya que con la llegada de la siguiente estación,  lo más probable es que éstos luzcan como árboles más fuertes.

El último paso de la poda deberás darlo con la llegada de la primavera, ya que en esta época del año comienzan a aparecer las primeras flores y los primeros frutos. Y aunque te parezca algo extraño, deberás podar estas primeras flores y estos primeros limones, con el objetivo de que los próximos que salgan crezcan más fuertes y más grandes.

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