Las altas temperaturas del verano son motivo de insomnio para muchas personas, que ven reducida su capacidad de descanso debido al calor que hay en el ambiente. Sin embargo, existen una serie de trucos que te permiten descansar lo que necesitas. Aquí te mostramos 6 consejos para dormir bien cuando hace calor.
Trucos para conciliar el sueño cuando hace calor
Se acerca el verano y son muchos los que temen ver reducido su descanso nocturno debido a las altas temperaturas típicas de esta época. Si no tienes la suerte de tener un aparato de aire acondicionado cerca, descubre unos sencillos trucos para dormir bien cuando las altas temperaturas aprietan:
1. Bajar las persianas durante el día
Con el objetivo de que la habitación en la que duermes conserve el máximo frescor, uno de las medidas que puedes tomar para evitar el calor es bajar las persianas durante las horas centrales del día, y abrirlas sólo por la noche.
Este truco es especialmente efectivo para aquellas habitaciones que están ubicadas en una zona soleada de la vivienda, ya que estas estancias corren el riesgo de sufrir un calentamiento similar al que tiene lugar en los invernaderos.
2. Cenas picantes pero no abundantes
Aunque pueda parecer un consejo contraproducente para combatir el calor, lo cierto es que tomar una cena picante te ayudará a dormir más fresco. ¿Y esto por qué? Pues simplemente porque nada más cenar tu cuerpo perderá calor a través de la sudoración, por lo que cuando llegue la hora de acostarte te sentirás mucho más fresco. Si te has pasado, puedes aprender cómo reducir ir el exceso de picante de los guisos para descansar a la perfección.
Sin embargo, lo que no se debe hacer para combatir el calor al dormir es tomar una cena demasiado abundante, pues la ingesta de demasiadas calorías al final del día puede hacer que sudes más a la hora de dormir, y tu sensación de calor sin duda alguna, aumentará.
3. Beber agua helada
Beber agua de forma frecuente es uno de los mejores trucos para sobrellevar mejor las altas temperaturas del verano. Sin embargo, para combatir el calor nocturno, lo mejor es beber un vaso de agua bien fría justo antes de irse a la cama.
Si vas a beber durante la noche, te recomendamos ponerle unos cuantos cubitos de hielo al agua y así ésta se mantendrá mucho más fría. Y si tienes dificultades para conciliar el sueño, evita el café helado o cualquier refresco con cafeína.
4. Usar el ventilador estratégicamente
Aunque tendemos a pensar que los ventiladores refrescan el ambiente, esto no es del todo cierto. Y es que, estos aparatos lo único que hacen es mover el aire justo por detrás de sus aspas. Por ello, dependiendo de donde los coloques, recibirás una mayor o menor cantidad de aire.
La posición estratégica para que un ventilador de suficiente aire cuando estamos en la cama, es ponerlo justo delante de una ventana abierta. Al ser la temperatura exterior más fría que la de la habitación, esta corriente de aire que se genera te ayudará a sentirte más fresco cuando estés durmiendo.
Y si en tu habitación no tienes ventana o no la tienes muy cerca de la cama, un truco muy efectivo es llenar un recipiente grande de agua, ponerle dentro muchos cubitos de hielo y colocarlo justo detrás del ventilador. Verás como enseguida notas el frescor del aire que mueve el ventilador desde la cama.
5. Dormir abajo
Cuanto más baja sea tu cama, es decir, cuanto más cerca duermas del suelo, menor será la sensación de calor. Esto es debido a que el aire caliente tiende a subir, mientras que el aire frío siempre se mantiene abajo.
6. Meter las sábanas en la nevera
Para dormir bien, o al menos, conciliar el sueño de la manera más refrescante posible, un viejo truco es meter el juego de sábanas en la nevera y colocarlo en la cama justo antes de acostarte.
Si tu problema es que te despiertas muchas veces cada noche, te recomendamos que aprendas cómo dormir del tirón toda la noche y descanses lo que necesitas cada día.