Uno de los puntos más importantes del contacto entre el ciclista y su bicicleta son sus pedales. Una buena posición del pie en el pedal permitirá transmitir mejor la fuerza de las piernas al movimiento de la bicicleta.
Para una correcta ubicación de las calas en las zapatillas lo primero que se debe hacer es ubicar el metatarso de nuestro pie. Este debe coincidir con el eje del pedal. Posteriormente con la zapatilla puesta realizar una marca en la suela coincidiendo con esta zona del pie.
Uno de los aspectos más importantes en el montaje de las calas es que la ranura de la cala debe coincidir con la marca que hemos realizado previamente en la suela. Esta ranura a su vez coincide con el eje del pedal lo que nos permite ejercer en el punto exacto la fuerza que hacemos con nuestras piernas.
Para instalar la cala hemos de observar que la parte que presenta un corrugado es la que se coloca hacia la suela de la zapatilla, en la parte que va hacia arriba se coloca la arandela encargada de sujetar los tornillos que fijan la cala a la zapatilla.
Se coge la zapatilla observando la suela y se coloca la cala sobre la marca realizada previamente y se atornillar, engrasando antes los tornillos. Por último hemos de hacer coincidir la marca con el eje de la cala y dejarla en posición neutra lo más centrada posible.