Un modo sencillo de arreglar un golpe en la carrocería del coche es utilizando dióxido de carbono líquido y un secador de pelo.
Lo primero que hay que hacer es calentar la zona donde se encuentra la abolladura del vehículo con el secador de pelo entre 30 segundos y un minuto. Después rápidamante hay que aplicar un chorro de Dióxido de carbono líquido durante 10 segundos aplicando el dióxido con la botella al revés.
Por último sólo tienes que esperar unos segundos y podrás oir cómo la chapa del coche recupera su posición inicial. Antes de limpiar la zona esperar a que el hielo desaparezca de la superficie y retirar con ayuda de un trapo.