A la hora de hacer cualquier reforma en casa o cambiar la caldera, es fácil que te asalten las dudas sobre qué caldera de gas elegir. Por suerte, escoger una caldera de gas es muy sencillo, basta con analizar cuestiones como la potencia, las dimensiones, la clase energética, el nivel sonoro y las prestaciones adicionales que nos ofrece la caldera a gas, como si incluye un termostato con el que podremos regular la temperatura o si tiene microacumulación.
La potencia
Sin lugar a dudas, lo primero que debes evaluar es qué potencia necesitas. Influyen factores tan diversos como el número de baños que hay en casa, si tienes ducha o bañera, cuántas personas viven -y la utilizarán-, la localización geográfica de la vivienda o el aislamiento térmico. Aunque parezca una tontería, la temperatura de la calle condiciona para bien o para mal el funcionamiento de la calefacción. En una casa normal -baño, o baño y aseo- basta con una caldera que tenga una potencia nominal máxima de 25 KW.
Cuestiones como el tamaño o el nivel sonoro son mucho más subjetivas que la potencia. Según el espacio del que dispongas, podrás elegir una caldera más grande o tendrás que conformarte con una de menor tamaño -no tiene por qué afectar a la potencia-. Lógicamente, cuanto menos ruido haga la caldera, mejor. En cuanto al consumo, la legislación comunitaria dice que solo pueden fabricarse calderas con tecnología de condensación: consumen un 30% menos de combustible que las calderas convencionales, y sus emisiones contaminantes también se reducen.
La clase energética
Una de las opciones más interesantes son las calderas Cerapur ZWBC de Junkers. Los especialistas las consideran entre las mejores calderas de gas Junkers debido, entre otras cosas, a la comodidad que ofrecen al usuario tanto en calefacción como en agua caliente. También cuentan con la función de microacumulación, que junto al preaviso de demanda QuickTap nos permite disfrutar de un chorro de agua continuo durante la ducha, aunque se abran más grifos.
Estas calderas tienen una clasificación energética A, que se puede elevar a A+ si le añadimos los controladores Junkers. No hace falta instalar módulos adicionales para gestionar la curva climática, y también son muy silenciosas. Algo parecido nos ofrecen las Cerapur Comfort ZWBC, con una potencia de 30 kW -la anterior se queda en 24 o 25 kW-, que además cuenta con un cuadro de mandos y controles digitales para saber en todo momento el estado de la caldera.
A la hora de elegir caldera, no pases por alto la etiqueta energética. Cualquiera de ellas con una potencia superior a 70 kW debe lucirla, pero muchas calderas de gas con una potencia inferior también la tienen. En ella conoceremos los datos de consumo y prestaciones de cada modelo. En la etiqueta energética aparecerán la clase energética -A++ es la más eficiente, G es la peor-, siempre dentro de una escala de colores, y también puede aparecer información sobre el ruido, muy útil a la hora de elegir una caldera silenciosa.
¿Aficionado a la domótica? Controla la caldera desde el móvil
La domótica tiene un papel cada vez más importante en nuestras vidas, y hay calderas que vienen equipadas con un termostato wifi, con el que el usuario la puede controlar a través de su móvil o de la tablet. Por si fuese poco, estas calderas son compatibles con las instalaciones térmicas solares, lo que permite al usuario ahorrar más de la mitad de la energía que consume en comparación con las calderas convencionales. En cualquier caso, puedes comprar un termostato wifi independiente, que es compatible con todas las calderas, y que tiene la misma función.