¿Es tu medio de transporte la bicicleta? ¿Has decidido comenzar de nuevo a usar la bicicleta porque te gusta practicar ejercicio? En ambos casos uno de los principales quebraderos de cabeza son las manchas de óxido de la bicicleta. Bien sea porque ya tiene un tiempo, porque se ha mojado al llover o porque simplemente llevas tiempo sin emplearla las ronchas de óxido aparecerán por mucho que queramos evitarlo. De ahí a la importancia de limpiar y engrasar la bicicleta correctamente desde el principio.
Afortunadamente, para todos esos casos contamos con algunos trucos infalibles para quitar el óxido de la bicicleta y en pocos pasos podemos terminar con ellos.
Materiales necesarios para quitar el óxido de la bicicleta
El material para eliminar las manchas de óxido de la bici que necesitaremos es bastante variado y podemos encontrarlo en casa sin la necesidad de invertir en él:
- Utensilios de limpieza: trapos secos, trapos mojados, un cubo
- Cepillos de dientes, pinceles especiales y herramientas que nos ayuden a extraer eslavones
- Papel de lija
- Producto de limpieza abrasivo
- Truco casero: zumo de limón (a veces combinado con sal). También puede ser sustituido por el oxino, el vinagre e incluso la cocacola.
Cómo quitar el óxido de la bicicleta en la cadena
Posiblemente, eliminar el óxido de la cadena de la bicicleta sea el proceso más tedioso. En la mecánica de la bicicleta, posiblemente esta parte sea una de las más importantes, pues puede impedirnos a que funcione correctamente. Por eso, lo que se aconseja en estos casos es limpiarla con regularidad y a ser posible aplicarle algún tipo de lubricante para prevenir.
Una vez que cuentes con todos estos materiales ya procederemos a eliminar el óxido de la cadena de la bicicleta paso a paso:
- Revisa el lugar donde tienes las manchas de óxido y elimina todo rastro de polvo con un trapo en seco al 100%. Este paso es muy importante ya que a veces la suciedad nos impide ver correctamente el lugar donde se encuentra el óxido.
- Cuando ya tengas localizadas las manchas toma un cepillo o un pincel especial para limpiar aquellas zonas de difícil acceso.
- Ahora, con un trapo, cogeremos el zumo de limón y el limpiador abrasivo. Lo que tenemos que hacer en este momento es frotar la mezcla sobre la superficie oxidada.
- En caso de que sea necesario y las manchas de óxido de la bicicleta no se vayan retiraremos la cadena y continuaremos frotando. Como consejo y para asegurarnos que las manchas se van correctamente podemos preparar una solución de zumo de limón en un cubo e introducir la cadena dentro. Si hacemos este paso, tendremos que esperar al menos 2 horas de reloj para que el resultado sea mucho mejor. Eso sí, inmediatamente que la retiremos tendremos que secarla completamente con un trapo en seco.
- Por último, una vez que la cadena esté completamente seca podremos incorporarla de nuevo al plato. Si algunos eslavones han sido separados en este proceso será el momento de añadirlos y revisarlos. El toque final se lo daremos con lubricante para cadenas de bicicletas.
Cómo quitar el óxido de la bicicleta en el manillar
En este caso, eliminar el óxido del manillar de la bicicleta es más fácil que en la cadena. Básicamente porque se trata de una zona mucho más cómoda para trabajar. Para aquellos casos en los que parezca muy complicado siempre se puede sustituir el manillar por uno nuevo o de segunda mano. Pero para evitar ese proceso, a continuación encontrarás una guía práctica para quitar el óxido de la bicicleta en el manillar paso a paso:
- Con un trapo en seco se retirarán los restos de polvo sobre la superficie del manillar.
- En este caso, optaremos por la cocacola para retirar el óxido de la bicicleta, no daña en exceso el metal, por lo que no debemos preocuparnos. Así, cogeremos un trapo en seco y comenzaremos a frotar.
- Después, dejaremos que el producto actúe por unos minutos sobre el manillar y después lo retiraremos con un trapo húmedo.
- Si todavía las manchas no se han ido, en este caso la otra alternativa es preparar en un estropajo o esponja vinagre y frotarlo sobre las manchas. Para retirarlo tendremos que hacer lo mismo que en el paso anterior. Eso sí, hay que asegurarse de que quede bien seco para evitar daños en el metal.